¡Hola “miedo”! ¿Cómo estás?

Muchas veces nos encontramos en la vida con algún miedo que nos detiene o nos obstaculiza el camino. A veces es un miedo real, otras es un temor que nuestra mente nos presenta como posible, pero es sólo eso, un juego mental. A veces es un temor justificado y otras es producto de memorias encriptadas en nuestro Ser.

Te propongo un juego de imaginación. Imagínate que ese miedo se materializa. ¿Cómo sería? Tal vez un monstruo gigante o una sombra pequeña. ¿Te asusta ver esa imagen? ¿Cuánto? Mucho, poco, nada…

¿Qué le dirías a ese miedo? Te invito a hacerle algunas preguntas

¿Quieres decirme algo? ¿De qué me proteges? ¿Es conveniente para mí que sigas allí? ¿Qué puedo hacer para que te vayas?

Afrontar los miedos y hablar con ellos, suele ser muy sanador ya que te permite analizarte y analizarlos.

¡Te propongo el desafío!