¿A quién estás esperando?
- terapiasbioser

- 31 may 2022
- 2 Min. de lectura

Cuando ves que todo aquello que buscas en el “otro” no lo encuentras, seguramente es algo que debes proporcionarte tú mismo.
¿Estás esperando a otra persona para lograr un cambio en tu vida? En general, el “otro” funciona como un espejo que nos muestra lo que en nuestro interior queremos conseguir. Un espejo, que muchas veces no es tan cordial como quisiéramos, pero en definitiva cada cual tiene sus formas muy particulares formas de expresarse y de actuar.
¿Añoras paz en tu vida? Es tiempo que busques en tus emociones y en tu realidad diaria esa paz que tanto deseas. Puesto en palabras pareciera muy sencillo de realizar, pero llevarlo a la práctica es un trabajo bastante arduo ya que implica una búsqueda personal de todas aquellas cosas que te la proporcionarían. Esto implica sentarte a meditar sobre tus deseos, tus emociones, tus relaciones familiares o amistosas, sobre aquello que te llena el alma y aquello que te proporciona un estado de bienestar en el cual sientes que el tiempo no pasa. La idea es enfocarse en aquello que sí quieres y desenfocarse de todo aquello que no deseas.
Pero nuestra mente juguetona y saltarina nos lleva una y otra vez hacia aquellos temas que no nos gustan, aquello que deseamos erradicar de nuestras vidas, volviendo una y otra vez al mismo punto de partida: la búsqueda de la tan anhelada paz en los “otros” y sus actitudes. Y entonces, ese “otro” a modo de espejo nos refleja aquello que nos molesta y nos desvía de la tan anhelada paz, apareciendo como el culpable de todos nuestros males.
El trabajo interno requiere mucha valentía, ya que debemos asumir que somos los protagonistas de nuestras propias biografías o como diría Neruda, “el arquitecto de mi propio destino”. Con cada decisión que tomamos, el camino se bifurca y, a modo de enramado, se va abriendo en un universo de posibilidades, ofreciéndonos una y otra vez la posibilidad de encontrar aquello que tanto estamos buscando y que solamente se encuentra en nosotros mismos.






Comentarios